Normalmente cuando alguien se levanta negativo, siente decaimiento y desánimo, tenderá a escoger colores apagados y pesimistas, en cambio, cuando nos levantamos contentos y de buen humor, sí escogemos colores alegres.

tu estado de ánimo. Para ello analiza qué emociones tienes y ponte acorde a cómo te gustaría estar, por ejemplo, te levantas un día y te analizas: “hoy me siento sin vitalidad, pero justamente por eso voy a darle color a mi vestimenta” y de repente te pones una camiseta roja y sonríes.
De esa manera tú mismo te incitas a la acción y a subir la moral. Aunque los colores no hagan milagros, ten por seguro que habrás contribuido a mejorar tus emociones usando el color que necesites en cada momento.
Si te levantas estresado y necesitas relajación, puedes optar por colores relajantes como el azul, verde o violeta.También teniendo en cuenta dónde tienes que ir y qué impresión necesitas causar, ya que no es lo mismo salir en un ambiente amistoso, que ir a una reunión importante. Está demostrado que los colores influyen en el estado de ánimo y aunque no sea en un alto grado, cada grano de arena que juntes a tu favor mejorará tus emociones.
Y no olvides que dichas sensaciones son las que tus clientes sin ser conscientes recibirán de ti , aprovecha cualquier arma que esté en tus manos para mejorar la percepción que tus clientes tienen de ti.
Publicado:Epiformes.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario