¿Se puede medir el dolor?

Buenos días a todos , si se le puede llamar bueno a un día donde desde Galicia nos llega la noticia  del accidente ferroviario de ese tren que salió de Madrid con destino a Santiago y donde realmente llegó fue a un destino que queda lejos del mundo de los vivos , irónicamente un alto tanto por ciento de pasajeros iba a Santiago a ver al apóstol , que ironía y que pago el recibido por tanta devoción .


Esta mañana yendo a trabajar puse la radio , debo decir que con la intención de esquivar la noticia , ya que con los años en vez de endurecerse me el corazón , pareciera que cada día que pasa es más tierno y lechal , no lo puedo evitar , cada día todo me afecta más , será que cada día me siento con la edad, menos avaricioso , menos egoísta , menos envidioso (todos en mayor o menor medida lo somos por una razón u otra) en definitiva , pienso más en vivir los pequeños momentos dulces de la vida.

 Como iba diciendo , conducía de camino a la tienda cuando sintonicé por error Onda Cero y escuché un comentario que hacía Carlos Herrera ,me puso los "pelos de punta" es algo que en otras ocasiones en otros siniestros ya me estremeció , es algo que ya pensé y es el hecho de escuchar entre una fila de cadáveres teléfonos que suenan de forma aleatoria sin cesar , llamadas hechas por  de familiares que de forma desesperada llaman con la única esperanza , que su ser querido les conteste al otro lado de la línea .

Me resulta estremecedor y doloroso imaginarme el momento , si la desesperación fuera medible  de seguro que esta llegaría al infinito , ¿Cuantos ruegos , plegarias rezos y deseos en segundos se deben de concentrar al otro lado de esa línea telefónica ? En estas circunstancias hasta el más ateo o infiel se convierte a creyente.

Que insignificantes somos que creido nos lo tenemos y que poco sabemos disfrutar de lo que el día a día nos ofrece , lo peor es que , la aflicción nos dura poco por no decir nada , mañana tristemente será otro día y nada habremos aprendido

Un abrazo a todos en especial a las familias de las víctimas